Artículos de Opinión

::Articulo de Opinión – El HLA Alicante también sabe ganar después de perder

Una victoria que confirma que el proyecto sigue vivo en los momentos de duda

En el deporte solo hay una verdad que no admite matices: ganar o perder.
Pero hay momentos de la temporada en los que no basta con ganar,
lo que importa es cómo se hace.

El HLA había arrancado el curso con una brillantez a la que no estamos acostumbrados. Siete victorias y una sola derrota. Ganar parecía sencillo, casi cotidiano. Pero más allá de los números, lo que invitaba al optimismo era otra cosa: orden, coherencia, una idea reconocible. Por fin un equipo que no parecía vivir al día. Por fin algo que sonaba a proyecto.

Y entonces llegaron las derrotas. Dos seguidas. No como un golpe seco, sino como esos avisos que no hacen ruido, pero remueven por dentro. En Alicante sabemos leer esos momentos. No es tanto el miedo a perder, sino que el miedo nos haga volver a perder el rumbo.

Por eso el partido de ayer no era uno más. No por la clasificación ni por el rival, sino por la necesidad de ver cómo reaccionaba el equipo cuando la inercia dejaba de empujar. Alrededor del Centro de Tecnificación se respiraba algo distinto. Nada de euforia, nada de urgencias. Un ambiente contenido, casi prudente. Miradas que buscan señales, conversaciones a media voz, esa calma tensa que solo aparece cuando el aficionado no viene solo a ver ganar, sino a comprobar si puede creer.

Y el HLA respondió muy bien. Supo deslumbrar al inicio, pero sobre todo supo sostenerse cuando el partido dejó de ser cómodo. Aceptó los momentos incómodos, gestionó la igualdad y no se dejó arrastrar por los nervios cuando llegó la hora de decidir.

Ahí apareció ese poso que no siempre se refleja en las estadísticas, pero que distingue a los equipos que están creciendo de verdad.

Fue una victoria sin fuegos artificiales. Y quizá por eso fue tan importante.

A la salida no había euforia, había algo mejor: alivio. Alguna sonrisa discreta. Algún comentario en voz baja. Esa sensación compartida de haber pasado una prueba silenciosa.

Porque los proyectos de verdad no se anuncian, se reconocen. Y este HLA, después de perder, ha demostrado que también sabe ganar sin traicionarse, sin prometer lo que aún no toca.

No ha vuelto la euforia. Ha vuelto la confianza. Esa que no se grita, pero acompaña al aficionado de camino a casa.

Y en Alicante, eso ya es mucho.

kiko Solozábal

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba