::Fútbol – La Plaza de los Luceros se tiñe de blanquiazul para festejar un ascenso del Hércules 14 años después
Unas 20.000 personas vitorean al entrenador y la plantilla en la fiesta del ascenso a Primera Federación tras una emocionante y trabajada victoria ante el Lleida (2-1) en un abarrotado estadio Rico Pérez
La recepción oficial en el Ayuntamiento a jugadores y cuerpo técnico está prevista este lunes, a partir de las 19.00, y los edificios y monumentos más representativos de la ciudad se iluminan de azul como homenaje al equipo
Barcala: “Alicante necesitaba una alegría como ésta, que recompensa a una afición que está muy viva y deseosa de que el Hércules vuelva a la categoría que merece”
La Plaza de los Luceros se ha vestido de blanquiazul en la tarde de este domingo para festejar el ascenso del Hércules a Primera Federación 14 años después del conseguido en Irún, que le valió entonces para jugar en Primera División. Unas 20.000 personas, según cálculos policiales, han participado en esta gran fiesta herculana en el corazón de la ciudad entre cánticos, música y vítores a los jugadores y al cuerpo técnico del club alicantino.
La celebración en el «templo» del herculanismo ha tenido lugar tres horas después de la finalización del partido Hércules-Lleida, correspondiente a la última jornada del grupo III de Segunda Federación, y en el que el equipo entrenado por Rubén Torrecilla ha conseguido el ascenso tras superar por 2-1 al cuadro catalán en el estadio José Rico Pérez, en el que se han congregado unos 30.000 espectadores en medio de un ambiente espectacular de animación constante y euforia final por el logro deportivo.
A la conclusión del encuentro, y después de celebrar el salto de categoría en el abarrotado Rico Pérez, una marea herculana se ha dirigido hacia la plaza de los Luceros, a la espera de la llegada de la plantilla. Puntual a la cita, al filo de las 17.00 horas, ha llegado el autobús de los héroes del ascenso, que han sido aclamados por los miles de seguidores concentrados en torno a Luceros y las avenidas de Alfonso el Sabio, Estación, General Marvá y Paseo de Soto.
Uno a uno, los jugadores han subido al estrado situado en la confluencia de la plaza con Alfonso el Sabio para saludar a la afición y corear juntos cánticos de apoyo al Hércules. «No vamos a parar con este ascenso; el próximo año, a Segunda», han recalcado varios de los integrantes de la plantilla para delirio de la parroquia blanquiazul, que ha enloquecido, bailado y cantado con sus ídolos.
Después de 90 minutos de comunión entre plantilla, cuerpo técnico y afición, los jugadores han dado la «vuelta olímpica» a Luceros para saludar personalmente a los seguidores situados en las primeras filas del perímetro de seguridad de la plaza. Acto seguido han subido al autobús para emprender viaje de regreso al Rico Pérez. Hasta esa hora, poco antes de las 19.00, no se había registrado ningún incidente digno de mención en la fiesta del ascenso, que se ha convertido en una gran ‘mascletà blanquiazul’ a un mes y medio de las fiestas de Hogueras.
El alcalde Luis Barcala ha presenciado el partido en el Rico Pérez, acompañado de varios miembros de la corporación municipal, y a la conclusión del encuentro ha señalado que “Alicante y el herculanismo necesitaban una gran alegría deportiva como ésta. Es la merecida recompensa a un equipo comprometido y entregado y a una afición que está muy viva y deseosa de que el Hércules vuelva a la categoría que merece por historia, tradición, ciudad e hinchada».
Recepción oficial en el Ayuntamiento
La plantilla y el cuerpo técnico del Hércules serán recibidos este lunes, a partir de las 19 horas, en el Ayuntamiento de Alicante. Llegarán en un autobús descapotable, como ocurrió cuando se consiguió el último ascenso a Primera División. El acto protocolario se desarrollará en el Salón Azul y, posteriormente, saldrán a los balcones de la Casa Consistorial para saludar a los miles de aficionados que se esperan.
En señal de homenaje y reconocimiento al equipo y la afición herculana, el Ayuntamiento iluminará esta noche de azul el Castillo de Santa Bárbara, la fachada del consistorio, la plaza de los Luceros y el Mercado Central.