El ingenio deportivo no se detiene. Si en la primera entrega explorábamos carreras con esposas, duelos entre ajedrecistas y boxeadores, y persecuciones de quesos rodantes, esta vez viajamos por nuevas disciplinas igual de inverosímiles, donde la creatividad y el humor son tan importantes como la destreza física.
Buzkashi: el polo afgano con una cabra
En Asia Central, especialmente en Afganistán, existe un deporte ancestral conocido como Buzkashi, que podría describirse como una versión extrema del polo… pero con una cabra sin cabeza en lugar de pelota.
Los jinetes compiten por arrastrar el cuerpo del animal hasta una zona determinada, demostrando fuerza, habilidad ecuestre y coraje. Considerado un símbolo de prestigio y honor, este deporte tradicional se celebra en grandes festivales y atrae a miles de espectadores.
Volcano Boarding: surfear un volcán activo
En las laderas del volcán Cerro Negro, en Nicaragua, los aventureros cambian las olas por ceniza volcánica. El Volcano Boarding consiste en deslizarse a toda velocidad —sentado o de pie— por la pendiente de un volcán activo, alcanzando hasta 80 km/h.
Con monos protectores, gafas y una tabla metálica, los participantes desafían la gravedad y el calor. Es una mezcla de deporte extremo y turismo que convierte la naturaleza en un escenario tan peligroso como espectacular.
Sepak Takraw: el fútbol acrobático del Sudeste Asiático
Originario de Tailandia y popular en países como Malasia o Indonesia, el Sepak Takraw combina fútbol, voleibol y artes marciales.
Los jugadores deben pasar una pelota de ratán por encima de una red, pero solo pueden usar los pies, rodillas, pecho o cabeza. Las acrobacias que ejecutan son impresionantes, con saltos y giros en el aire que parecen sacados de una película de acción. Es un deporte tradicional, pero también una de las pruebas de coordinación más exigentes del planeta.
Unicycle Hockey: hockey… sobre monociclos
En el Unicycle Hockey, el equilibrio lo es todo. Los equipos juegan al hockey clásico, pero montados sobre monociclos, lo que exige una enorme concentración y dominio del cuerpo.
Originado en Alemania y Reino Unido, el deporte ha crecido con torneos internacionales y clubes especializados. Mantener el control del disco mientras pedaleas sin perder el equilibrio convierte cada partido en un espectáculo tan caótico como fascinante.
Extreme Ironing: planchar en lugares imposibles
Sí, existe una competición dedicada a planchar ropa en los lugares más inverosímiles: montañas, fondos marinos o incluso en paracaídas. El Extreme Ironing nació en Reino Unido como una broma, pero se convirtió en un fenómeno global.
Los “atletas” combinan la aventura extrema con la rutina doméstica, demostrando que la creatividad humana no tiene límites… ni siquiera con una tabla de planchar de por medio.
Más allá de la rareza
Desde volcanes ardientes hasta monociclos en movimiento, estos deportes demuestran que la competencia puede adoptar las formas más insólitas.
Detrás de cada una de estas disciplinas hay un mismo impulso: el deseo de superarse, de divertirse y de celebrar la imaginación. Porque, al final, el deporte no siempre trata de ganar… sino de atreverse a jugar de otra manera.
